Hace pocas horas eran rivales políticos, sin embargo a raíz de maniobras puntuales, el mounstruo de tres cabezas de la derecha local emprendió una feroz campana de desprestigio contra los comicios electorales. 

Los otrora candidatos y hoy siameses de la poítica Ermitaño Marín, Miguel Briones y Juan Tello aparecieron desde la televisora local, denunciando que el coordinador de la Oficina Descentralizada de Procesos Electorales (ODPE), como era hermano del congresista Rimarachín les podía hacer daño a sus candidaturas. Por lo que decidieron patear el tablero de la democracia invocando a sus seguidores, de forma airada a desconocer los resultados.

Toda vez que en las vísperas habían reconocido su anticipada caída en picada en cuanto a las preferencias en el electorado, y una abrumadora aceptación al candidato del MAS, Coco Urquía.

Lo irónico del incidente es que los candidatos de ultraderecha, sabían hace mucho la relación sanguínea que existe entre el funcionario de la ODPE y el legislador, pero nunca lo denunciaron solo hasta 24 horas previos al sufragio. Cuando los medios de comunicación debía guardar silencio en cumplimiento a la normativa vigente.

Uno de ellos hasta se animó a decir en televisión abierta "que el candidato de las izquieras (en alusión a Urquía) no debería ganar, por lo que se pediría reprogramación de elecciones".

El coordinador de ODPE informó a las medios radiofónicos que "el proceso electoral está garantizado, para lo cual se habilitaron los locales de votación así como la distribución del material electoral con prontitud". Así también invocó a mantener la calma y que la ciudadanía debía de participar de su derecho al sufragio.

Luego, en medio de un confuso incidente apareció la mañana de hoy convenientemente muy temprano la vivienda del candidato Ermitano Marín con rastros de un incendio que felizmente no se consumó, pero como ya se había creado el tridente de candidatos, no había a quienes más responsabilizar que a los simpatizantes de los candidatos restantes como sospechosos.

Finalmente y gracias a dios, el incendio no trascendió a mayores y la seguridad del candidato está a buen recaudo, al parecer según los efectivos de serenazgos expertos en explosivos se habría tratado de una bomba casera que algún desadaptado había sembrado en el lugar.

Los demás postulantes al municipio celendino se solidarizaron con Marín, a la vez que pidieron calma a sus seguidores.